Leo y oigo sobre la polemica de la retirada de la estatua ecuestre de Franco en Madrid. Parece ser que la imposibilidad para retirarla, por parte de los anteriores gobiernos del PP, era la dificultad en determinar quien era el propietario del monumento. Se le atribuia al Ayuntamiento, aunque este lo negaba...Resulta que era de la Universidad Complutense, y que fue encargada por Lain Entralgo en 1956 para colocarla en el Arco del Triunfo de Moncloa, en la entrada a la Ciudad Universitaria.Y asi fueron pasando los años. Ahora con la nocturnidad del que sabe que hace algo que va a ser conflictivo, van y la retiran...Y se arma el belén. Unos pocos cientos de nostálgicos irrelevantes, Blas Piñar incluido, convierten el lugar en motivo de peregrinación y además de insultos al Gobierno Socialista. Como en un guiño arqueológico, de regusto arcaico-rancio y cuartelario, aparece aquello de "Presente", y brazos en alto al mas puro estilo fascista...Todo ello muy en consonancia con los tiempos que vivimos. ¿Alguien sabe si queda alguna estatua de Hitler en las calles de Berlín? ¿Y una avenida en Roma dedicada a Mussolini?.
Y los de siempre salen con aquello de que no hay que desenterrar viejas heridas...Para desenterrar primero hay que enterrar. Por ese orden... Han pasado 30 años desde la muerte del General Franco. Muchos de los simbolos de la parafernalia franquista no fueron retirados en su día por miedo, por evitar incidentes, por no despertar al "dragón dormido" de una ultraderecha supuestamente poderosa y bien enraizada (¿?) ... Han pasado 30 años, y aunque con nocturnidad, secretismo y extrañas formas, ya era hora de enterrar el pasado que aun nos duele. O si no enterrarlo, al menos mandarlo a los almacenes o a los museos, en espera de que el tiempo sedimente los hechos y se escriba la historia con la imparcialidad que solo da el tiempo. Parafraseando a Gardel parece que 30 años son nada...
Cuando determinados politicos de derechas maduren tanto como los ciudadanos que les votan, nuestra España entrará de lleno en el siglo XXI. Por el momento y gracias a Don Francisco, aun podemos ver de que pie calzan algunos...Los 700 que, equivocados o no, dignamente se mojan, haciendo lo que en el fondo tienen que hacer, y otros como Rajoy que no saben estar a la altura de las circunstancias... Que descentradillo anda el pobre hombre... Aznar tuvo algunas equivocaciones, y dejar escapar a Rato fue de las mas importantes... O tal vez Aznar pensó en quemar un cartucho intrascendente a la espera de que en un futuro mas propicio Rato tuviera su momento...