Estoy hasta el moño de esos ansiosillos moteros que consideran a todo vehículo que les supere en numero de ruedas como un obstáculo a esquivar. Te paras en un semaforo y en breves segundos el cretino motorizado de turno se te coloca delante, pasando a escasos milimetros de tu espejo retrovisor... O vas en fila a velocidad reducida y ves como una manada de zanganos con/sin casco te van sorteando, haciendo eses, y obligandote a frenar para no embestirlos o ser embestido por ellos...Y esas saltadas de semaforo en rojo, como si las normas de circulación nada tuvieran que ver con ellos. Libertad total, sin restricciones y sin barreras.
El problema es cuando el trafico adquiere su velocidad normal, y los obstáculos son ellos y su escasa velocidad. Si los adelantas, acercandote a una distancia tal vez el doble de la que minutos antes ellos te han superado, mirada inquisitorial, como queriendo decirte: "A donde vas, animal, que me vas a dar...".
El problema, y de eso abusan, es que no puedes hacer nada contra ellos, ya que tu prudencia te impide jugar su juego, porque con su fragilidad tienen todas las de perder...Ellos no tienen el "sentido del riesgo" desarrollado, y a ti te sobra responsabilidad.
Y piensas, que si se da un golpe, el poco cerebro que tienen puede acabar esparramado por el asfalto, y tu seras responsable... Dichosas motitos...
martes, enero 24, 2006
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