martes, mayo 22, 2007

LEYES FUNDAMENTALES DE LA ESTUPIDEZ HUMANA

Recogidas en el libro Allegro ma non troppo (1988), del historiador económico italiano Carlo Maria Cipolla (1922 - 2000).


* Primera Ley Fundamental: Siempre e inevitablemente todos subestiman el número de individuos estúpidos en circulación.
* Segunda Ley Fundamental: La probabilidad de que cierta persona sea estúpida es independiente de cualquier otra característica de esa persona.
* Tercera Ley Fundamental (o de Oro): una persona estúpida es aquella que causa pérdidas a otra persona o grupo de personas sin obtener ninguna ganancia para sí mismo e incluso incurriendo en pérdidas.
* Cuarta Ley Fundamental: Las personas no estúpidas subestiman siempre el potencial nocivo de las personas estúpidas. Los no estúpidos, en especial, olvidan constantemente que en cualquier momento, lugar y circunstancia, tratar y/o asociarse con individuos estúpidos se manifiesta infaliblemente como un costosísimo error.
* Macroanálisis y Quinta Ley Fundamental: La persona estúpida es el tipo de persona más peligrosa que existe.

Corolarios de Giancarlo Livraghi, recogidos en El Poder de la Estupidez. Segunda parte, de septiembre de 1997.

* Primer Corolario: En cada uno de nosotros hay un factor de estupidez, el cual siempre es más grande de lo que suponemos.
* Segundo Corolario: Cuando la estupidez de una persona se combina con la estupidez de otras, el impacto crece de manera geométrica; es decir, por multiplicación, no adición, de los factores individuales de estupidez.
* Tercer Corolario: La combinación de la inteligencia en diferentes personas tiene menos impacto que la combinación de la estupidez, porque (Cuarta Ley de Cipolla) "la gente no estúpida tiende siempre a subestimar el poder de daño que tiene la gente estúpida".

COLABORACION CON LA JUSTICIA

Acabo de llegar de los Juzgados. Se me habia citado como testigo de parte de un paciente que tuvo hace 3 años un accidente de tráfico, por lo que sufrió lesiones que conllevaron una baja laboral. Baja que obviamente, al ser yo su medico de cabecera, firmé.
La compañía contraria no estaba de acuerdo en la reclamación económica, por lo que el abogado de su aseguradora, me cita como testigo.
Recibo una carta del Juzgado convocándome al juicio "con el apercibimiento que caso de no comparecer le parara el perjuicio que hubiese lugar en derecho..". Dado el cariño con que me llaman y ante el desconocimiento de la magnitud de la amenaza, obviamente decido acudir. He de pedir un permiso, y un substituto que me releve en la consulta.
Hace 2 semanas viene a consulta el susodicho paciente, al que manifiesto mi malestar por que al menos no se me hubiera pedido permiso. El me comenta que desconoce incluso la celebración del juicio...Le creo.
Me encuentro al llegar a mi paciente que me cuenta que ayer le llamó "su abogado" ( de la compañía de seguros) para citarle para el juicio.
Al poco llega el abogado, al saludarme le manifiesto mi "incomodidad"...Ante lo cual, en tono prepotente, me informa de mi "obligación de colaboración con la justicia"...

Según el diccionario de la Real Academia, colaboración de colaborar:
(Del lat. collaborāre).
1. intr. Trabajar con otra u otras personas en la realización de una obra.
2. intr. Escribir habitualmente en un periódico o en una revista, sin pertenecer a la plantilla de redactores.
3. intr. contribuir (‖ concurrir con una cantidad).
4. intr. contribuir (‖ ayudar con otros al logro de algún fin).

Por cierto, coaccionar de coacción:
(Del lat. coactĭo, -ōnis).
1. f. Fuerza o violencia que se hace a alguien para obligarlo a que diga o ejecute algo.
2. f. Der. Poder legítimo del derecho para imponer su cumplimiento o prevalecer sobre su infracción.

Momentos después, tras hablar con la parte contraria, vuelve el letrado y le ofrece a mi paciente un acuerdo económico de la parte contraria... 6000 euros, que nunca vienen mal. Llegado el acuerdo, finalmente no hay juicio.

Me siento utilizado...Una auténtica tomadura de pelo...Como si mi tiempo, y el del IBSALUT no valieran nada. Vaya comedia que se han montado unos y otros, bajo el manto protector, o la toga, de "La Justicia"... Colaboración con la Justicia es igual a complicidad en una comedia, una farsa ridícula, un apaño de última hora donde se regatea como en el Rastro, a espaldas de la Justicia (Dicen que la Justicia es ciega...Igual así, no se da cuenta de lo que se mueve alrededor)
Le pregunto al abogado si el tiquet del aparcamiento me lo pagará él como citante, su compañía de Seguros, o "la Justicia con la que he colaborado". Me contesta, con mas sorna que la mía, que se lo pida a la Justicia...
Que gran tratante de ganado ha perdido el mundo cuando ese individuo, que ejerce de abogado, decidió estudiar Derecho.

Me vuelvo a casa con una experiencia enriquecedora mas, incorporada a ese bagaje que con los años uno va acumulando. Y con la supuesta satisfacción de mi "colaboración con la Justicia".