miércoles, abril 01, 2009

MANIFESTACION 1 DE ABRIL




La amenaza de lluvia no ha impedido que más de 2.500 personas se hayan concentrado esta tarde en la palmesana Plaza de España para protestar contra la imposición del catalán en la Sanidad Pública en la mayor concentración de la historia en Baleares por esta cuestión. Pese a que el tiempo no acompañaba -aunque al comienzo de la concentración ha salido el sol- los profesionales sanitarios se han acercado para mostrar su repulsa a la implantación del decreto del catalán. Fuentes policiales cifran la asistencia en unas 2.200 personas mientras que los organizadores hablan ya de 3.500.

Durante la concentración, se han podido ver pancartas con lemas como 'Por una Sanidad sin exclusiones' o 'Catalán no. Mallorquín y castellano sí'. De este modo han querido mostrar su malestar por del decreto del catalán, aprobado por el Govern autonómico, que establece la obligatoriedad de uso de esta lengua aunque no dentro de dos años como se establecía en un principio, sino en tres. Los manifestantes han pedido también al unísono la dimisión del conseller de Salud Vicens Thomàs.

La protesta, que ha sido convocada bajo el lema 'Por una Sanidad sin exclusiones. Sí al catalán como mérito, no como requisito', ha contado con la presencia de altos dirigentes del PP como Rosa Estaràs, Toni Serra, Aina Castillo o Francesc Fiol. El lema elegido sintetiza su punto de vista sobre un decreto que supondrá a juicio de los profesionales la expulsión de "centenares" de médicos del sistema de salud, al tiempo que "vetará" el acceso de otros. En la concentración eran visibles banderas de España y de Baleares ondeando al aire.

En declaraciones a los periodistas, el secretario general del Sindicato de Médicos, Isidro Torres, ha señalado que, además de las 39 personas de Eivissa que ya han anunciado que se marcharán del archipiélago como consecuencia de la publicación del decreto, en Mallorca una veintena de profesionales sanitarios ya han manifestado que también se irán aunque "nos tememos un goteo constante". No obstante, el secretario general del Sindicato de Enfermería Satse, Jorge Tera, señala que el peor "efecto" será el que se producirá en los médicos y enfermeros de otras comunidades, entre los que tendrá un "efecto demoledor" puesto que "dejarán de venir en los próximos años".